20.000 m/s llevó ayer la Rambla de Benipila, sobre la que se ha llegado a pedir su entubamiento

CARTAGENA / LORCA (29 sep. 2009). - Da pavor sólo pensar que pasaría si la Rambla de Benipila que, según la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), llegó a alcanzar ayer los 20.000 metros por segundo en el tramo urbano de Cartagena que cruza, estuviera entubada o cimbrada como se ha llegado a escuchar.

Las aguas de esta rambla ahora encauzada y que desemboca en La Algameca Chica ya provocó, en las inundaciones de 2001, la desaparición de una mujer cuando fue arrastrado por las aguas el coche que conducía, al igual que gran número de vehículos de Navantia.

En su cauce fue instalado el cuartel y el circo romano en las fiestas de estos días celebradas en esta ciudad, y prohibido el 'botellón' que en este lugar se tenía la costumbre de celebar. El lunes, en esta rambla fueron contabilizados 543 litros por metro cuadrado, y las impetuosas aguas que llevaba se llevó todo lo que pilló por delante, entre otras cosas, los vestuarios y las oficinas del Cartagonova F.C., y a punto estuvo de desbordarse. Hoy, lo que los cartageneros del barrio de la Urbanización Mediterráneo, al que pertenecen las fotos tomadas ayer, por cuyo centro pasa rebosante la Rambla de Benipila, es que su cauce sea elevado para evitar males mayores.

También hay polémica en Lorca con la Rambla de los Patos, que igualmene cruza esta ciudad, por que su nuevo ayuntamiento gobernado por el Partido Popular, hace ahora exactamente un año, pedía a la CHS su entumabiento o cimbrado, desde el partidor del paraje de El Espejico hasta las compuertas de la Rambla de Tiata en el río Guadalentín, arguyendo que ello serviría "para garantizar la seguridad de los vecinos en caso de lluvias torrenciales".

El concejal de Obras, Ángel Meca, dijo que tramitaría la solicitud a petición de los propios vecinos, tras la preocupación despertada en los mismos por el anuncio del organismo de cuenca del entubamiento de los canales de aguas turbias de Cazalla, Marchena y Tamarchete.

Las rejas de entrada que precisa este sistema de tubos podrían bloquearse en caso de lluvia torrencial y provocar el desbordamiento de la rambla de Los Patos, que discurre paralela a una zona residencial en la alameda Virgen de las Huertas.

Las viviendas se encuentran en una cota inferior a la rambla, por lo que el peligro de inundación sería alto y la solución propuesta permitiría regular el caudal y la limpieza de los arrastres sería más rápida, según el ayuntamiento.