Mendoza lo tiene crudo con Francisco / Apunte de Argárico

MURCIA (24 mar 2013). - La farsa del valenciano disfrazado de cartagenero, José Luis Mendoza, parece que ya se acerca a su fin. Si en los últimos tiempos del dúo Benedicto XVI-Bertone las cosas se le tornaron hostiles, con su aparición pública incluso en los escándalos vaticanos, hasta tener enfrente a la Nunciatura en Madrid y mucha peor entrada en la diócesis de Cartagena, la elección de un Papa del corte de Francisco I, jesuita y algo más que muy bien visto en Wall Street, hace presagiar la pronta conclusión de su chiringuito-negocio de Guadalupe, en nombre de Jesús y de la Iglesia Católica, en los próximos meses.

Los planes excelsos para el Vaticano por quienes han hecho posible desde fuera de los muros vaticanos el ascenso del cardenal Bergoglio, con el fin de reformar a fondo la estructura para hacer posible su gobierno como si de una gran empresa multinacional se tratase, no cuentan para nada con oportunistas outsider como Mendoza, con indeseables apoyos hasta ahora en la curia romana a cambio de prebendas en una especie de nueva simonía a cambio de pretender desamortizar a la Diócesis de Cartagena, aspecto muy pronto detectado y combatido por el anterior obispo Reig Pla.

No le bastarán ahora a Mendoza apoyos de cardenales, ya en off, como Rouco y especialmente Cañizares, dos ascendidos al colegio por Juan Pablo II, el gran impulsor de unas sectas católicas ahora en riesgo de profunda reconsideración en aras de la universalidad de la iglesia y de conjurar el peligro disolvente que pueden llegar a suponer hasta chantajear al Papa. Benedicto XVI ha señalado el camino al respecto y Francisco I lo seguirá con diligencia y prontitud.

La proyección de todo eso en Murcia no tardaremos en comprobarlo tras el pacto discreto de todas las órdenes religiosas para hacer una piña en torno al nuevo Papa en el gobierno de la Iglesia Católica. Atención aquí, en nuestra región, al papel a jugar por jesuitas y franciscanos fundamentalmente, junto al obispo Lorca Planes, en los tiempos que se avecinan frente a elementos socialmente perniciosos como Mendoza, un oscuro personaje capaz de casi todo con tal de salirse con la suya a partir de su especial habilidad para manipular a su favor la corrompida condición humana de codiciosos como él.

Lo siento por los políticos murcianos que se le acercaron y los tontos de bote que se le pegaron en no sé que círculo para intentar medrar en base a unos supuestos apoyos vaticanos que hace algun tiempo que no tiene. Mendoza es ya un elemento residual y marginal en el nuevo proceso iniciado en su día, no en los barrios más pobres de Buenos Aires, sino en los ambientes más cultos y refinados de Nueva York, la principal diócesis católica del Mundo junto con Chicago.

En ese nivel es más que evidente que este caradura no hace pié y demuestra lo alejada que está Murcia de los verdaderos centros de poder por más que se empeñe el concejal Moya-Angeler en buscarle un sitio en la globalización aunque sea atajando por China.