La Comunidad de Murcia (PP) utiliza como rehenes a sus ciudadanos más vulnerables y dependientes

Valcárcel, Cámara y demas alcaldes del PP suspenden estrepitosamente en la aplicación de la Ley del Gobierno Zapatero

MADRID / MURCIA (11 jun. 2009). - Murcia es la comunidad autónoma española con el suspenso más estrepitoso en su gestión de la Ley de de Dependencia, con 0,5 puntos, según la calificación que le otorga la Asociación Nacional de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales. En este escandaloso resultado se tienen en cuenta las solicitudes de los ciudadanos, la personas evaluadas, la normativa desarrollada para poner en marcha la ley en cada región, el apoyo a los servicios sociales de los ayuntamientos, las buenas prácticas y el equilibiro entre las prestaciones que se conceden (residencias, ayudas económicas, etc.), entre otras variables.

Murcia es la peor comunidad en la que se está poniendo en práctica la Ley de Dependencia, y respecto a hace seis meses, ha caído de un 2 a un 0.5, siendo la única comunidad que aún no ha desarrollado una normativa regional para implantar esta ley, y por ello la comunidad murciana habría sido calificada incluso por debajo del cero.

El caso de Murcia al respecto evidencia algo más que problemas técnicos o de financiación. Ningún desacuerdo político puede utilizar como rehenes a los ciudadanos más vulnerables ni especular con el sufrimiento de las personas más necesitadas, ha aseverado el máximo responsable de la asociación autora de este estudio.

Es por ello escandaloso que el pasado nueve de junio, en la conmemoración institucional del Día de la Región de Murcia, celebrado en el Antiguo Mercado Público de La Unión, el presidente de la comunidad y del PP murciano, Ramón Luis Valcárcel, no sólo reivindicara sino que exigiera que todos "los españoles tengamos un trato igual, que nos otorguen las mismas oportunidades", y expresara que "la igualdad pasa por facilitar a todos los territorios las mismas herramientas y oportunidades". Pues ahí tiene esa herramienta, esa oportunidad, esa Ley de Dependencia común a todos los españoles y que él no aplica con la diligencia que se merecen los murcianos y murcianas más vulnerables.

Según el estudio al que estamos refiriéndonos y que coloca al gobierno regional murciano del Partido Popular (PP) como una auténtico indeseable, las "comunidades que tienen una mejor coordinación con los ayuntamientos, encargados desde hace treinta años de los servicios sociales, son las que mejores resultados obtienen, las que más ayudas están prestando". Lo que resulta más escandaloso aún, pues esta aseveración significa una clara denuncia al PP murciano que no sólo controla la comunidad autónoma sino la mayor parte de los 45 ayuntamientos de la región, incluido el de la capital y los más importantes, siendo el alcalde 'popular' de Murcia, Miguel Ángel Cámara, precisamente el presidente de la Federación de Municipios de la Región de Murcia (FMRM).

Es por ello que resulta asímismo escandaloso que en la conmemoración del Día de la Región del pasado nueve de junio, a falta de ideas y proyectos en una región en donde el modelo del ladrillo la sitúa en la peor de las situaciones en la actual crisis económica, Valcárcel se sacara de la chistera la creación de un Consejo Regional de Alcaldes que integraría representantes de los 45 municipios murcianos. Pues existiendo la FMRM con sus propios presupuestos, para qué quiere crear otro órgano supramunicipal que conllevaría más presupuesto público no en inversiones sino para gastos de representación.

Pero a Valcárcel le va muy bien la propaganda y actuar contra el Gobierno de España que preside José Luis Rodríguez Zapatero, aún a costa de la suerte de los mayores y más desfavorecidos murcianos y murcianas, pues con ello consigue más que excelentes cosechas de votos, que se le salen ya por la orejas, de atiborrado que está en esta región el PP. Valcárcel dijo ese mismo día de la región que "los murcianos son el mejor potencial con el que cuenta la región por ser personas entregadas, capaces y trabajadoras", pero se olvida de aplicarles la Ley de Dependencia a quienes han dado todo por esta tierra y se hayan en la necesidad de recibir apoyo de los poderes públicos. Claro, que en Murcia, debe haber mayores y "mavores".

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