Tras Grecia e Irlanda, el insaciable 'mercado' va hacia Portugal y España como nuevas víctimas

Europa entera ante un colapso sin precedentes si cae la península ibérica ante el miedo del capitalismo global

 MADRID (23 nov. 2010). - El "miedo de los insaciables mercados financieros internacionales" avanza a una velocidad de vértigo y tras confirmarse el rescate a Irlanda ahora su presión va diriga a la península ibérica. Portugal y España tienen todas las papeletas para convertirse en el siguiente objetivo en la lista de "víctimas" del sistema capitalista globalizado que ya se ha cobrado a Grecia e Irlanda. Se estima que la caída en desgracia de nuestro vecino país arrastraría a España. Este es el panorama que está siendo pintado a través de los medios de comunicación de Europa.

Si cayera Portugal, el contagió llegaría a España. Unas 1.400 empresas españolas facturan en Portugal 16.0000 millones de euros, el equivalente al 9 por ciento del PIB luso. Entre estas empresas con fuertes inversiones en el país vecino se encuentran Repsol, Cepsa, Iberdrola, Endesa, FCC, Sacyr, Inditex o El Corte Inglés.

Pero lo más llamativo, es que los principales bancos españoles como Santander, BBVA o Popular, o aseguradoras como Mapfre, controlan gran parte del sector financiero luso, acumulando activos de deuda y crédito tanto del sector privado como público del país vecino en torno a los 67.000 millones de euros. Y si se añaden los activos de Grecia, Irlanda e Italia, el riesgo de la banca española alcanzaría los 118.000 millones de euros, el equivalente al 1,2 por ciento del PIB.

La estimación del coste de un rescate de España procedente del Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (EFSF) rondaría los 500.000 millones de euros, siendo el establecido para Irlanda de unos 90.000 millones, y para Grecia, de 110.000 millones de euros. Para el caso español, la aportación del EFSF no sería suficiente, y tendrían que intervenir Estados Unidos, Japón y China.

El Gobierno de España tiene un escenario de pesadilla que ha de despejar con una avanzada consolidación fiscal y poniendo coto al gasto de las comunidades autónomas y ayuntamientos, cerrando el proceso de fusiones de las cajas de ahorro, y avanzando en las reformas estructurales del sistema productivo y del mercado laboral.

Las autoridades de la Unión Europea y la canciller alemana, Ángela Mérkel, han salido en defensa de la moneda única. España no es Grecia ni Portugal, su PIB es superior al billón de euros, su sistema bancario regulado desde 1994 y, aunque su deuda es inferior a la que tuvo entre 2000 y 2004, si las garras de los mercados internacionales del sistema capitalista cayeran sobre la península ibérica, Europa entera entraría en colapso

En clave política interna española, la miopía o la falta de escrúpulos de los dirigentes del partido en la oposición, que sólo piensa en llegar a la Moncoloa porque las actuales encuestas le dan como caballo ganador, como su secretaria general, María Dolores de Cospedal, y su portavoz parlamentaria, Soraya Sáenz de Santamaría, se han visto obligadas en la presente situación de altísimo riesgo para España y Europa de dar el mensaje de que la política económica española es correcta, pero añadiendo rizando el rizo de que el Gobierno que la dirige es culpable de no se sabe qué. Hasta aquí ha llegado, por el momento, el cretinismo del partido de la derecha española, manchado hasta las sienes por sus gigantescas tramas de corrupción alimentadas, precisamente, por el boom inmobiliario, el derroche y el festín, y su gangrena neoliberal.

1 comentario:

  1. Si tu vecino pierde el empleo, es recesión, si lo pierdes tú, es depresión.

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